viernes, 8 de agosto de 2008

Historia de dos mundos.

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Ella entra al piso, humilde, como todo lo que la rodea.
Lo primero que hace ella, es enfocar toda su falsedad en un asqueroso abrazo de 'Z' arrepentida.
'Z' es la figura que desarrolla ella en la vida de ella.
Allí esta el sofá.
Se sientan.
- Dime que te pasa. ¿Porqué no me lo cuentas? No llores.
- No te lo digo porque sé que estás mal, por el trabajo y eso.
- Para algo soy 'Z', soy la única persona que estará a tu lado siempre, incondicionalmente, he hecho todo esto por vosotros, os he inculcado las aspiraciones que yo no pude realizar, y bla bla bla...


Y mientras tanto, ella se pregunta, qué tiene que ver todo eso con el hecho de que ella la odia, sí sí, odia a su 'X', y se siente sola, tan sola que se muere por dentro poquito a poco, pero como está tan extremadamente sola, ni aunque se pusiera un cartel en la frente, NADIE, se daría cuenta del olor a putrefacción que emana de ella, y a veces, también quiere un poquito de animo, alguien que le diga que hace algunas cosas bien, (en vez de "es lo que tienes que hacer") y también pretende que ella se interese por sus intereses, que entienda que todo lo que dice, hace, o piensa, no es un capricho.
Y ella también pretende hacerle entender, que las personas tienen necesidades, y ella siempre dice 'son cosas que tendrías que ver'. Pero cuando ella tiene que ver, entrever, o suponer necesidades ajenas, no es falta de carisma, es que "la gente es cerrada".

Y así siempre. Y os lo cuento en versión no-extendida. Ella contra ella.
Dos mundos tan juntos, y tan lejos.
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2 comentarios:

bicholove dijo...

ella es fuerte y debil a la vez

estonosepara dijo...

no quiere que la atormenten sus miedos!de afrontarse a su realidad

imagina'R

un beso